5.8. Continúa Intervención en salud con enfoque de género
5.8.5. Género y agua, saneamiento e higiene
La sola acción de suministrar agua e instalaciones de saneamiento no garantizará, de por sí, una utilización óptima ni un impacto positivo en la salud pública, si no se consideran las cuestiones de género, la cultura y las relaciones sociales para diseñar y ejecutar un programa adecuado de abastecimiento de agua, saneamiento e higiene efectivo y seguro. Es importante involucrar a todos los miembros de la comunidad, particularmente a las mujeres y las niñas, en todas las etapas de los programas de gestión de emergencias, ya que aportan valiosas perspectivas, capacidades y contribuciones para adaptarlos a las necesidades específicas. En muchas culturas existe una estrecha relación entre las mujeres y el agua por lo que es crucial comprender las necesidades especiales de las mujeres y niñas para decidir la selección y el diseño de las instalaciones y programas de saneamiento.
El Manual sobre cuestiones de género en la acción humanitaria del IASC (5-182)señala las normas y procedimientos adecuados para la provisión de agua, saneamiento e higiene a las poblaciones afectadas, tomando en cuenta las necesidades particulares, e incluye una lista de verificación de los elementos que hay que tener en cuenta en esta actividad.
5.8.6. Género y artículos no alimentarios
Las situaciones de desplazamiento conllevan siempre una pérdida de propiedad personal, por lo que, además de alimentos, las personas afectadas necesitan artículos no alimentarios básicos imprescindibles para la vida, tales como mantas, esteras de dormir y elementos para protegerse de la intemperie, utensilios de cocina, jabón, así como recipientes para recoger y almacenar el agua. Las mujeres y las niñas necesitan suministros sanitarios. Los niños y las niñas también tienen necesidades específicas, especialmente aquellos que han quedado huérfanos.
Los artículos no alimentarios deben responder a las características de la cultura, el contexto, el clima y las necesidades de la población. Por ejemplo, en regiones afectadas por paludismo, se han incorporado mosquiteros impregnados con insecticida a la lista de artículos necesarios. Las toallas sanitarias y/o estuches de aseo para mujeres deben ser elementos normales de los paquetes de artículos no alimentarios, pero los tipos de artículos incluidos pueden variar de una región a otra.
La participación de las mujeres en la distribución hace a menudo este proceso más eficiente. La logística de la distribución debe tener en cuenta cual es el momento más apropiado para asegurarse de que mujeres, niñas, niños y hombres se beneficien por igual de los artículos en cuestión.
El Manual sobre cuestiones de género en la acción humanitaria del IASC ofrece orientaciones básicas para la planificación de actividades relacionadas con productos no alimentarios e incluye una lista de verificación de los elementos que hay que tener en cuenta en esta actividad.
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