1. El mundo de hoy y los desastres

  • Imprimir
  • Share

En muchos países, el desarrollo se enfoca en el crecimiento económico, mientras que los otros elementos se ignoran.

El desarrollo sostenible es el “desarrollo que satisface las necesidades del presente sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras de satisfacer sus propias necesidades”

La Declaración de Johannesburgo sobre el Desarrollo Sostenible reafirma el compromiso de los estados miembros de la ONU al desarrollo sostenible, que es visto como tres “pilares interdependientes y que se refuerzan mutuamente”: desarrollo económico, desarrollo social y protección ambiental. 

El descuido del desarrollo social y de la protección ambiental que acompañan el desarrollo económico en muchas partes del mundo está aumentando el riesgo para las comunidades. En este desequilibrio de desarrollo, existen dos factores que podrían contribuir al incremento del riesgo para las comunidades y que merecen un escrutinio más profundo: el aumento de la urbanización y el cambio climático.

El aumento de la urbanización asociado a un desarrollo inadecuado hace que comunidades sean más vulnerables, en otras palabras, más propensas y menos flexibles ante los distintos peligros que son:

  • Aumento en la presión sobre los servicios críticos
  • Urbanización en áreas de amenazas naturales
  • Incremento de amenazas tecnológicas
  • Mayor costo de los desastres
  • Alta dependencia de las zonas urbanas de los servicios básicos y complementarios (electricidad, transporte, teléfono, etc).
     

 “La alta densidad de la población es un conductor importante del riesgo en el que la calidad de las viviendas, la infraestructura y los servicios son deficientes” dice la Estrategia Internacional para la Reducción del Riesgo.



Los hechos son:

  • La población del mundo sigue aumentando. De cerca de 6.500 millones en el 2007, se estima que para el 2050 serán más de 9.000 millones. 
  •  La población está creciendo más rápidamente en las áreas urbanas. Según la División de Población del Departamento de Asuntos Económicos y Sociales del Secretariado de las Naciones Unidas, en el 2008, el número de habitantes de las zonas urbanas (3.400 millones) igualó, por primera vez en la historia, el número de habitantes de las zonas rurales. El mundo puede esperar que la población urbana en el 2050 sea el 70 % del total, mientras que la población rural llegará a su máximo de 3.500 millones hacia el 2019 y luego se reducirá de ahí en adelante. Se espera que, prácticamente, todo el aumento de la población urbana se dé en los países en desarrollo.
     

Crecimiento urbano y rural para las regiones más y menos desarrolladas, 1950 - 2050

  

  • Un amplio número de grandes ciudades están localizadas en áreas expuestas a peligros creados por el hombre. En Latinoamérica y el Caribe, muchas de las capitales están ubicadas en medio de áreas altamente sísmicas; entre ellas están: Lima, Bogotá, Ciudad de Guatemala y Ciudad de México. Tres de las ciudades más pobladas del mundo, se encuentran en América Latina: Ciudad de México, Buenos Aires y Sao Paulo. Estas, están expuestas a amenazas múltiples. 

 

Mega-Ciudades expuestas a múltiples amenazas

  
Riesgo de Desastre
Cuidad
  Tokio
  Cd. De México
  New York
  São Paulo
  Mumbai
  Delhi
  Shanghái
  Calcuta
  Jakarta
  Buenos Aires
Población (Millón)
Terremoto
Volcán
Tormentas
Tornados
Inundación
Marcas de tempestad
35.2
x
 
x
x
x
X
19.4
x
x
x
 
 
 
18.7
x
 
x
 
 
X
18.3
 
 
x
 
x
 
18.2
x
 
x
 
x
X
15
x
 
x
 
x
 
14.5
x
 
x
 
x
X
14.3
x
 
x
x
x
X
13.2
x
 
 
 
x
 
12.6
 
 
x
 
x
X
Fuente: UNEIRD Campaña: Mi ciudad se está preparando, 2010


La proporción de población en estas ciudades afectadas fácilmente por los peligros, es alta. La vulnerabilidad de la tierra, la calidad de la construcción, los servicios públicos deficientes, la pobre planeación urbana, el refuerzo insuficiente de las zonas de protección, etc., son algunas de las razones para el incremento de la vulnerabilidad. Puerto Príncipe, Haití, ofrece unos de los ejemplos más destacados de lo que puede pasar cuando un gran número de personas, viviendo en  condiciones de alta vulnerabilidad, están expuestas a las amenazas naturales